miércoles, 4 de abril de 2007

Bajo órdenes femeninas

Bajo órdenes femeninas

Tres novenas cuentan con mujeres fisioterapeutas a
cargo de prácticas, rehabilitaciones y tratamientos.

Por Víctor Pillot Ortiz
Periódico El Nuevo Día
4 de abril de 2007


Mariela García es la entrenadora de los Titanes en la temporada 2007.
Cada día es más común ver a la mujer en funciones o facetas que eran consideradas propias de varones.

El béisbol era uno de estos campos donde es inusual ver a una fémina dentro de un terreno de juego y menos como fisioterapeuta.

Sin embargo, las novenas de Juana Díaz, Barceloneta y Florida tiene o contaron con tres profesionales de la salud encargadas de la preparación, prevención y tratamiento de sus peloteros.
Joibel Colón Bonilla, quien es la pionera en este campo con poco más de un lustro de experiencia, trabajó con los Maratonistas de Coamo y en los últimos tres años con los Poetas de Juana Díaz. Liz Vanessa Miranda Delgado, quien labora con los Industriales de Barceloneta, y la Dra. Mariela García, quien estuvo a cargo de los Titanes de Florida, han estado laborando en esta campaña del Béisbol Doble A.

“En un principio hubo un poco, no de rechazo, sino de desconocimiento de lo que era la profesión y mis funciones en el equipo”, dijo Colón, quien comenzó a laborar con los Maratonistas en 1997. “Pero me encontré con buenos profesionales y respetuosos, y hasta el día de hoy”.

“Me siento bastante cómoda. Trabajo en la Universidad Metropolitana dando terapia y ejercicios de rehabilitación y estaba familiarizada (con peloteros que juegan con la institución), pero nunca me había arriesgado a tirarme. No me había arriesgado porque no me daba el tiempo”, explicó por su parte Miranda, quien debutó este año con los Industriales y es la encargada de la preparación física, preparación y rehabilitación de los jugadores de la novena.

Miranda comentó que su llegada al equipo posiblemente extrañó a los integrantes, pero ante la competencia que ha demostrado se ha superado cualquier reparo que pudieran tener.
“Al principio, no sé si les habrá chocado como tal, pero después me decían que me veía seria. Que ellos entendían que yo mujer y ellos todos hombres... Pero no ha habido problemas con ninguno. Es más, ahora me llaman aparte y me preguntan qué tipo de ejercicio tienen que hacer”, destacó Miranda, quien cuenta con un bachillerato en terapéutica atlética y una maestría en administración de programas de eficiencia física.

Colón, por su parte, indicó que en sus 10 años de experiencia en este béisbol ha tenido quejas sobre el tipo de ejercicio que recomendaba, pero dijo que una efectiva comunicación, unida al resultado obtenido por el atleta, las han minimizado.

“No puedo decir que al principio lo sabía todo. He ido leyendo, aprendiendo con fisiólogos del ejercicio y educadores que cuentan con más conocimiento”, dijo la coameña, quien posee un grado asociado en fisioterapia, un bachillerato en terapéutica atlética y una certificación de salud escolar. “Aún me encuentro con el discrimen en el sentido de ser mujer. Les doy directrices y ellos entienden que son más fuertes que las que le daban los preparadores físicos que son hombres. Pero para mí ellos no son ratones de experimento”.


“Es cuestión de educarlos, ver cual es la realidad. No explicarles y dejarles con dudas. Es explicarles fisiológicamente (lo que el ejercicio hará) y hacer que crean en ti”, agregó. “No ha sido difícil (conseguir la confianza del pelotero). Mi experiencia, trabajando con hombres, es más positiva que trabajando con mujeres”.